Monday, November 21, 2005

Los olvidados de la sierra guatemalteca, niños
Noviembre/2005


Secos como los maizales a su alrededor. Así tiene los pies Ruendi, el niño de 6 años que juega con lodo, de pantalones rotos, que anda descalzo y no deja de sonreír.
Freddy también tiene 6 años, es el de zapatos enlodados y suéter negro descosido, el que dice buenos días y ofrece la mano para saludar, el que no conoce la leche y desayunó una taza de atol con incaparina *.
"Ellos están parvulitos, no saben leer", dice Benigno, quien ya cumplió los 9 y asegura que él sí sabe. "Paa-saa-pooor-te", dice cuando se le muestra un documento para demostrar su aprendizaje en la escuela mixta rural de San Antonio Las Barrancas, una aldea de la sierra guatemalteca a la que sólo se puede llegar a pie, pues los caminos para vehículos están destrozados.
A Elfidio le encanta jugar a la pelota, tiene 8 años y el sueño de ser futbolista profesional cuando sea grande, como Martín Machón, su ídolo, el ex seleccionado nacional y ex jugador del Galaxy de Los Ángeles y del Santos Laguna de México. Por eso lleva bien atados sus zapatos tenis, desgastados, pero con los que aún mete goles, presume el chiquillo.
El que se acerca medio desconfiado es Joaquín. "Yo también sé leer y también juego a la pelota", dice con el ceño fruncido este chavo de 11 años, quien tiene la misma ilusión que la mayoría de los chamacos que aquí viven: jugar al fútbol cuando sean grandes.
La que se tira plácidamente sobre un colchón de hojas de maíz es Susely, de 7 años, le da pena que la vean y por ello se cubre el rostro jalándose el huipil, la blusa que suelen vestir las mujeres indígenas de esta región maya.
Aquí el otoño es muy frío, pero el cielo de esta mañana media nublada estrena los primeros rayos del sol, mientras Glendi ya está ayudando a su mamá a deshojar las mazorcas que alcanzaron a cosechar, ya que casi toda la milpa se echó a perder con la tormenta Stan que azotó a principios de octubre. La niña tiene 11 años y es bien hábil para levantar la cosecha, pero lo que ella quiere ser de grande es maestra de escuela.
Su hermana, tres años mayor, se llama Costelinda, es la que sabe distinguir muy bien qué maíz sirve y cuál ya se echó a perder por la humedad, la que quiere ser enfermera porque le gusta ayudar a los demás.
José no se quiere quedar atrás y dice que él va a ser doctor, aunque apenas es un chamaquillo de 11 años que está aprendiendo a leer y escribir, y que por lo pronto ayuda a sus vecinos a cortar las mazorcas para conseguir algo de comer.
La niña que va cargando un pesado costal es Briseida, tiene 3 años y unos ojos bellos y enormes. Adentro lleva un chilacayote, una especie de calabaza que al cocerla sirve para preparar una agua dulce muy buena para reponerse de la resaca, según dicen los lugareños. Así de pequeña, Briseida ya ayuda a los quehaceres de la casa, esta vez le tocó ir al mandado.
El flaquito, el que tiene manchas de desnutrición en la cara, al que se le salen los mocos cuando brinca por las piedras del río, es Humberto, tiene 6 años y no quiere hablar más, está como asustado, se queda tieso y pela los ojos. Y así se queda, como hipnotizado.
En lo alto de la montaña, desde donde se alcanza a ver como mayor plenitud la silueta del perezoso volcán Tacaná, el punto de referencia de la frontera con Chiapas, México, está la casa donde vive Soyla, la niña de 7 años que es muy platicadora y que cuando sea grande quiere ser cocinera.
El que la acompaña, el que trae un gorro como el que usaba "El Chavo del Ocho" y se limpia la derecha con su pantalón para saludar, es el hermano mayor de Soyla, se llama Lino, tiene 9 años, todavía no decide qué será de grande, pero por lo pronto ya se aprendió las vocales y lo demuestra señalando cada una en el estampado de su suéter, donde se lee: "California Race Club".
Ruendi, Freddy, Benigno, Elfidio, Joaquín, Susely, Glendi, Costelinda, José, Briseida, Humberto, Soyla y Lino, son sólo trece de los miles de niños que en esta región sufren la pobreza extrema, son sólo trece de los miles que padecen de desnutrición, son sólo trece de los miles de marginados, vulnerables a sufrir la hambruna que a esta zona está amenazando, son sólo trece de los miles de olvidados de la sierra guatemalteca.

* Incaparina es un suplemento proteico y vitamínico a base de maíz y soya.

Tuesday, May 17, 2005

Jesús Blancornelas, periodista
Marzo/2005

De dos vehículos bajaron ocho hombres, todos armados, cargando rifles de asalto AK-47 y pistolas 9 milímetros.
Voltearon de un lado a otro, se colocaron en posición de ataque y cerraron el paso de la avenida Las Américas, en el fraccionamiento El Paraíso, frente al número 4633, una antigua casa donde se lee: “Zeta, libre como el viento”.
Iban escoltando un automóvil color azul que se estacionó en la cochera y del que bajó Jesús Blancornelas, el director del semanario Zeta, hombre de cabellos canos, barba blanca, pequeño de estatura, anteojos, y voz de amigo.
A la entrada de la casa que desde 1980 ha albergado al periódico Zeta, se observan tres fotografías: Héctor “El Gato” Félix, asesinado en 1988, Luis Lauro Valero, muerto en 1997, Francisco Ortiz Franco, ejecutado en 2004.
Zeta parece ser una zona de guerra. Una decena de hombres custodian el edificio. La ciudad de Tijuana también es una zona de guerra. Las ejecuciones de la mafia parecen ir en aumento. En lo que va del año pasan de cien.
En los últimos años, Blancornelas ha estado en la mira de la mafia por dedicarse a escribir sobre el fenómeno del “narco”. Y de manera breve lo explica en una entrevista para La Opinión.
¿Actualmente, cómo está la situación del narcotráfico en la frontera?
“Está muy desordenada, porque no han respetado las reglas no escritas del narcotráfico; se han invadido entre ellos y ahorita Tijuana es una zona de guerra. Están los Arellano, ‘El Mayo’ Zambada y ahora Osiel Cárdenas; es un pleito enorme y ya van muchos muertos”.
¿Y en esta zona de guerra, cómo quedan los periodistas?
“Pues afortunadamente no están vulnerables, porque afortunadamente,no se ha metido el narcotráfico con ellos. La última vez que se metieron fue cuando mataron a nuestro compañero Ortiz Franco, que ésa es otra de las cosas, se brincan las reglas”.
Blancornelas dice que lo que le ocurrió a él hace años y a su compañero Ortiz Franco, lo que pasó a Gregorio Rodríguez, en Escuinapa, Sinaloa; a Roberto Mora y Francisco Arratia, en Tamaulipas, son caprichos de la mafia.
“Ninguno de nosotros estuvimos relacionados con el narcotráfico, ni ayudando al narcotráfico ni traicionando al narcotráfico. Hemos sido víctimas de caprichos del narcotráfico, sólo porque les caímos gordos o no les gustó lo que escribimos”.
Periodismo y muerte
El valor y la integridad que lo han caracterizado como periodista le han valido a Blancornelas para que el Club de Prensa de Los Ángeles lo haya hecho acreedor del Premio Daniel Pearl, que le será entregado el próximo mes de junio. Pearl, reportero del diario The Wall Street Journal, fue decapitado por los talibanes en Pakistán.
Ganador de múltiples premios internacionales, Blancornelas considera el Premio Daniel Pearl una responsabilidad más como periodista.
“Es un premio que, como todos los premios que se otorgan, principalmente de organizaciones extranjeras, pues te responsabilizan y te comprometen más, porque son otros ojos, pero, a la vez, para quienes estamos metidos en este trabajo, es como una vacuna, porque si alguien tiene pensado hacerte algo, se detiene un poco más. Ya hay una organización extranjera que te está viendo, ya no nomás es aquí en la ciudad”, dice en la sala de reuniones del semanario.
Blancornelas estuvo a punto de morir el 27 de noviembre de 1997, cuando fue emboscado por sicarios vinculados al cártel de los hermanos Arellano Félix. Ráfagas de AK-47 destrozaron la camioneta en la que viajaba con su guardaespaldas Luis Lauro Valero. A él sólo lo hirieron de cuatro balazos, pero su chofer y escolta murió acribillado a balazos.
Después del ataque de 1997, de las muertes de sus tres compañeros y de las decenas de asesinatos de periodistas en México, Blancornelas reflexiona.
¿Vale la pena morir por el periodismo?
“No. El periodismo es una profesión, pero de ninguna manera se puede comparar con una vida”.
Cuando Blancornelas entró en el periodismo, hace ya más de 45 años, su sueño era tener su propio periódico. Y lo logró en 1980, cuando fundó Zeta junto con su colega Héctor “El Gato” Félix.
“Lo logré, pero ojalá y no lo hubiera logrado, estoy casi arrepentido, porque la vida de tres compañeros no se compara por tener un periódico”, agrega acomodándose los anteojos.
Reportero deportivo
De 69 años de edad, originario de San Luis Potosí, llegó a Tijuana a finales de 1959, para buscar una plaza como reportero de deportes en el periódico El Mexicano que recién se inauguraba. Quería escribir las crónicas deportivas, tal y como lo hacía en su tierra natal.
“Venir a Tijuana hace 45 años no era tan fácil como hoy, no era de decir pues me regreso y ya; no, era un problema muy grande, hasta para hablar por teléfono”.
Por eso tuvo que conformarse con un puesto de “cubreturnos”, hacer el trabajo del reportero de información general que se había ido de vacaciones, o cubrir la nota de sociales de quien se había enfermado o hacer la crónica policiaca de quien había faltado.
Poco a poco, Blancornelas sobresalió y hoy es reconocido como uno de los periodistas que más escriben y saben sobre el tema del narcotráfico, aunque lo niega modestamente.
“No soy un especialista en narcotráfico, lo que pasa es que, si tú ves el periódico Zeta de hace 20 años, vas a ver un periódico de contenido político, pero luego empieza a llegar el narcotráfico y los indocumentados, entonces empieza a hacerse noticia y pues, nos metimos a cubrir el tema”.
Después del atentando de 1997, Blancornelas empezó a recibir informes sobre el tema de diferentes partes del país.
“Empecé a escribir más de narcotráfico, para tratar de que no le pasara algo a otros compañeros, y que el narcotráfico viera que no podía doblar al periodismo. Entonces pasó que me llegó mucha información de muchas partes, porque hay compañeros a quienes no les dejan escribir o no quieren escribir porque tienen miedo, pero de ahí que digan que soy especialista pues no. Hay gentes que saben más”.
¿El narcotráfico ha podido doblegar al periodismo?
“No, y no va a poder. El narcotráfico puede corromper a un gobierno federal, estatal o municipal, pero para escribir sobre el narcotráfico van a venir también a escribir periodistas extranjeros, porque no es un tema que tengamos que tratar sólo los mexicanos, y no van a poder tampoco con ellos”.
Blancornelas se queda pensativo un rato y antes de terminar la entrevista asegura: “El narcotráfico no va a poder acabar jamás con el periodismo”.

Tuesday, April 12, 2005

Jorge Hank Rohn, alcalde de Tijuana
Agosto/2004

En el pasillo hay dos perros, un pastor alemán negro y un inmenso león berger. Custodian la puerta de entrada de la oficina de Jorge Hank Rohn, el hombre que el domingo obtuvo en Tijuana una victoria sonada para el Partido Revolucionario Institucional (PRI), después de 15 años de administraciones del Partido Acción Nacional (PAN).
Acostumbrado a las apuestas, Hank se la jugó y ganó. Un triunfo que ha sido considerado un modelo a seguir por el PRI para las elecciones presidenciales de 2006.
"Si eso dicen ojalá y sea cierto para que recuperemos la presidencia", dice Hank Rohn en entrevista para La Opinión.
"Indiscutiblemente soy priista y trabajaré con todo lo que pueda para recuperar Los Pinos para el candidato que mi presidente y mi partido denominen para el 2006", comenta refiriéndose a su compadre Roberto Madrazo Pintado, dirigente nacional del PRI.
"Sí, es mi compadre, y también soy compadre como de otras 500 personas", dice mientras se acomoda el mismo chaleco rojo que durante toda la campaña vistió.
De ojos y cabello claros, Hank se muestra atento, deja a un lado el té de manzanilla y el agua de Jamaica para hablar claro. Consciente de que es un personaje muy cuestionado, rechaza las acusaciones.
"Todos leen el principio y nadie el final, todo está desmentido al final y está totalmente probado que no tiene ninguna base, que no tiene ningún sustento y que lo que les gusta es refritear porque no encuentran nada nuevo, entonces no opino nada de ello", afirma de manera tajante.
Cuestionado con relación a las acusaciones que ha hecho sobre su persona el semanario Zeta de esta ciudad, referentes a la supuesta autoría intelectual en los asesinatos de los periodistas de ese medio, Héctor “El Gato” Félix y Francisco Ortiz Franco, Hank Rohn se muestra molesto.
- ¿Usted cómo toma toda esta situación de acusaciones en su contra?
"Igual como la pregunta que me estás haciendo, lo haces con total impunidad y total apertura, con la misma les contesto, pues que no hay ninguna prueba. ¿Leíste el expediente alguna vez? Trata de investigar un poquito antes, no tienen absolutamente nada, nunca fui citado, no existo en el expediente, que la mente de alguien quiera seguir sacando eso, pues ésa es su forma de lavar su conciencia".
- ¿Por qué cree que mataron a “El Gato” Félix?
"No tengo la menor idea".
Hank se reclina en su silla, frente a él un cenicero con la imagen de Benito Juárez, las paredes adornadas con cuadros art deco y algunos otros con imágenes de caballos o gallos de pelea. Lo acompaña su jefe de comunicación Francisco Ramírez. Su oficina está ubicada en el palenque, junto al Hipódromo de Tijuana, cuya concesión le fue entregada hace mucho a este hombre considerado uno de los más ricos de México. Es también dueño de las casas de apuesta Caliente existentes en todo el país.
Él, el hombre conocido como “El Rey de las Apuestas”, padre de 18 hijos y en espera de que Dios le dé más, según comenta, a partir del próximo 1 de diciembre será el alcalde de Tijuana.
El principal reto es la seguridad y para ello se ha comprometido a atacar el narcotráfico desde su competencia municipal. Dice que, a partir del 1 de diciembre, empezará a cerrar las llamadas “tienditas” y “picaderos”, que son los lugares donde se vende, consume y distribuyen drogas.
- Después de 15 años de estar gobernando el PAN en Tijuana, ¿cuáles son los cambios que prepara?
"Básicamente todos, la verdad, no han hecho nada de bien estos panistas, pero creo que sensiblemente la relación con la gente, siento que los servidores públicos nos debemos a la gente que nos puso ahí y por consiguiente debemos estar en total y absoluta comunicación todo el tiempo con ellos. Va a ser un gobierno totalmente sensible a la gente, a las necesidades de la misma y a las exigencias de la misma, vamos a trabajar con ellos y para ellos.
"Le vamos a regresar la seguridad a nuestra ciudad, que es uno de los clamores más fuertes que existen en toda la ciudad, en todos los ámbitos, para donde quiera que voltees. Entonces vamos a atacar la inseguridad frontalmente, vamos a acabar con los picaderos y las tienditas, a partir del 1 de diciembre vamos a cerrar todos, y así van a permanecer los tres años.
"También vamos a trabajar en las guarderías, que se les olvidó tristemente a los actuales, porque no hay ninguna municipal, vamos a poner todas las que sean necesarias y vamos a empezar con un programa de 1,095 días de obra pública, del 1 de diciembre de 2004 al 30 de noviembre de 2007, en donde todos los días vamos a estar trabajando en obra pública para abatir al máximo el rezago tan grande que existe en la ciudad en cuanto a infraestructura, alcantarillado, pavimentación, luz, todo".
- Eso se oye muy prometedor, así como decía Vicente Fox durante su campaña que en 15 minutos solucionaba los problemas.
"Gracias por la comparación, pero pues tú no te oyes como ningún otro periodista. Yo espero que no vuelva a repetirse, lo voy a hacer, no sé cómo lo oigas tú, pero lo voy a hacer".
- Durante la celebración de su triunfo el domingo por la noche usted señaló que no habrá gasera en las islas Coronado como lo ha planeado el actual Ayuntamiento y la empresa Chevron.
"Nos vamos a oponer total y rotundamente a ellas, porque definitivamente yo creo que hay lugar para todo y una isla tan cercana a la playa y a la ciudad la peor tontería es poner algo contaminante, dígase gasera o dígase lo que quiera que sea contaminante. Es la peor tontería y nos vamos a oponer a ello. Es obviamente una consulta federal, pero el uso de suelo lo da el municipio y este municipio no lo va a soltar. Si llegamos y ya está dado, lo vamos a impugnar".
- ¿Cuál va a ser su relación con Estados Unidos?
"Espero tener relaciones excelentes con Estados Unidos. A nivel de servidor público creo que sería una tontería garrafal el no tener relaciones con todos los 'meillors'. A mí me choca ser pocho, porque no son presidentes municipales, serían como delegados en la conversión hacia México, porque la municipalidad es San Diego y todas las demás son ciudades, pero espero llevar una excelente relación con todos los 'meillors' de todo California o de todos los que se puedan. Por lo menos con los que están de aquí a San Diego, para que nos ayudemos en lo que se pueda para que sepan que ésta es su casa y que son bienvenidos siempre que quieran venir.
"Buscaré tener, principalmente, una relación turística, porque básicamente la ciudad de Tijuana se formó por el turismo... y es importante regresar el turismo familiar a nuestra ciudad y ése viene principalmente de California.
Barbudo en invierno".
Este hombre cuya imagen de hombre barbudo y cabellera larga cambió hace unos tres meses al convertirse en candidato a la presidencia municipal de Tijuana, asegura que se volverá a dejar el pelo largo y la barba.
“Casi todos los inviernos me dejo tanto la barba como el pelo largo. Cuando llegué aquí [a Tijuana] tenía el pelo a media espalda. Cuando mi hermano Cuauhtémoc murió hace 17 años también dejé de cortarme el pelo durante un año; cuando murió mi señor padre también, pero todos los inviernos me dejo crecer tanto el pelo como la barba. De hecho, el pelo nunca lo había usado tan corto, pero hace cuatro años en la Olimpiada en Sydney me rapé y obviamente se tardó en crecer y nadie lo cuestionó, nadie preguntó... en diciembre me dejaré crecer el pelo y la barba otra vez, porque me gusta y porque habitualmente hace frío y cubre el frío”.
Para concluir la entrevista Hank Rohn da las gracias a los tijuanenses.
“Quiero decirles que finalmente nos hizo justicia la Revolución, tenemos los tijuanenses al presidente municipal que queríamos tener y estoy absolutamente contento”, concluye mientras en la puerta permanecen los dos perros, fieles a su amo.

Monday, March 14, 2005

Jorge Tejeda, pandillero
Febrero/2005

El cholo se le acercó tanto, que Jorge sintió el frío cañón de la nueve milímetros en su abdomen.
- "¿Qué barrio ese?", preguntó el cholo.
- "De La Dieciocho homie".
A la respuesta de Jorge le siguieron una serie de balazos. El cholo era del barrio rival y había ido a territorio enemigo para matar a tres pandilleros de los otros. Jorge sobrevivió, pero duró seis meses sin poder caminar.
Jorge Tejeda es un joven de Mid-City que desde muy chavillo, a los 12 años, abandonó su casa para vivir en las calles, con sus "homeboys" los pandilleros. Para él era mejor que estar con sus padres en medio de un divorcio.
Ahora Jorge ha cumplido 20 años como miembro de una de las pandillas más poderosas y violentas de Los Ángeles: "La 18", tal como la trae tatuada en la cabeza rapada.
Dentro del barrio Jorge es uno de los más respetados gracias a los años que pasó en la cárcel, a colocarse un tatuaje visible y a demostrar su "valentía".
A los 16 años asistía a la escuela sólo para tener clientes de mariguana, hasta que el profesor de la clase lo descubrió y avisó al director.
- "Fue entonces cuando caí a la cárcel por primera vez".
- "¿Por vender mariguana en la escuela?".
- "No, porque le clavé un cuchillo en la espalda al profesor".
Jorge estuvo tres años en la cárcel para menores por ese caso, pero según cuenta, cuando salió de prisión ya había ganado más respeto en el barrio.
"En realidad aprendí más cosas en la cárcel, salí más cabrón, luego embaracé a otras dos muchachas, en total tengo ocho hijos con tres mujeres, la mayor ya va a cumplir 17 años y el más chico tiene 2", comenta este hombre que tiene el cuerpo lleno de tatuajes.
En su vida como pandillero ha sido baleado cuatro veces y en otra ocasión le clavaron un cuchillo por negarse a tachar la firma de su barrio en una pared.
"Uno nunca deja de ser pandillero, porque nunca te sales del barrio, no te puedes salir de la pandilla, ya estás marcado", dice este joven que después de 10 años en la cárcel ha decidido abandonar las cosas negativas de ser pandillero.
Ahora es consejero de jóvenes dentro de un programa anti-pandillas llamado Networks Organized for Gang Unity and Neighborhood Safety (NOGUNS).
Pero si en la calle le preguntan: "¿Qué barrio ese?", la respuesta es la misma: "De La Dieciocho homie".

Tuesday, January 25, 2005

Gloria Trevi, cantante
Diciembre/2004

Desde que salió de la cárcel está hambrienta. De éxito, de aplausos. Quiere comerse el mundo. Viajar, cantar, bailar y soltarse el pelo. Pero mientras espera que todo eso llegue con la gira de 52 conciertos que iniciará en febrero, Gloria Trevi calma su hambre con un sándwich de jamón y pepperoni.
Estamos en un cuarto del hotel donde se hospeda, en Beverly Hills. Todo el día Gloria ha estado hablando con los medios de comunicación para la promoción en Estados Unidos de su nuevo disco, el sexto en su carrera, llamado Cómo nace el universo.
Esta es su octava entrevista del día y ya le rugen las tripas. "Yo voy a comer porque ya me anda", dice la cantante y educadamente me ofrece para que también le dé gusto al diente.
El mundo ha cambiado para la cantante que pasó casi cuatro años en la cárcel, acusada de corrupción de menores pero exonerada en septiembre pasado de todos los cargos.
Mientras se prepara su "trevisándwich" (la receta es con chile pimiento rojo, lechuga y mucha, pero mucha mayonesa), Gloria estará dispuesta a hablar de su encierro, de lo que representa su nuevo disco, de los cambios en su vida y hasta de política.
También hablará del hombre de quien se enamoró ciegamente y por quien fue a parar a la cárcel: Sergio Andrade.
Gloria da primera la primera mordida y le lanzo la primera pregunta:
¿Cómo nace el universo?
"Creo que para cada quien el universo es como lo vemos, para mi el universo nació el día que nació mi hijo, nació como yo me imagino debe nacer el universo de todos nosotros, con una explosión, porque el parto es como una explosión, y duele".
Después de la cárcel ¿cómo cambió Gloria Trevi?
Fíjate que más que cambios hay una evolución, porque uno no puede convertirse de cachorro en mariposa, sino que el cachorro se convierte en perrito y el gusano en mariposa, entonces en mí ha habido más que nada una evolución, porque yo no me puedo convertir en otra cosa que no soy.
Gloria hace una pausa, toma una Coca-Cola para pasar el alimento y empiezo a leer un párrafo de la canción número dos del disco, llamada Eres un santo: Dicen que tú eres como el mismo Diablo, que tenga cuidado porque eres muy malo, dicen que tú engañas a las que te aman, dicen que tú tienes muy negra tu alma, ¡ay si supieran!
El resto de la letra se dedica a alabar a alguien a quien considera un santo y un alma de Dios, y surge la interrogativa.
¿Se refiere a Sergio Andrade?
No, nada tiene que ver. Esa canción cada vez que la canto pienso mucho en mi novio, que se llama Armando, y que lo empezaron a criticar mucho, que si andaba conmigo por interés, que si era joto, ahorita tiene un problema legal, sin embargo él conmigo es un santo, no sé como haya sido en su pasado, pero el me hace cada milagro que ¡hummm!
La canción ‘Señor Presidente’, ¿es una crítica al presidente de México?
No, yo creo que es más que nada un pedido, a todos los presidentes, porque le podemos cambiar una frase de la canción, donde dice: ‘Señor Presidente yo quiero pedirle que nos arregle los parques de mi barrio como los pinos de Usted’. Y en vez de eso podemos poner: ‘Señor Presidente yo quiero pedirle que nos pinten las casas como la Casa Blanca de Usted’.
¿Te gustaría ser presidente?
Más que nada me gustaría poder ayudar, tener el poder de hacerlo.
¿Crees que México esta preparado para que una mujer sea presidente?
Creo que sería muy bueno, pero a mí no me gusta tanto hacer esa diferencia entre mujer y hombre, no se trata de que si México está preparado, sino que México está necesitado de una gente capaz, que ame mucho a su país, sin miedo, que no vaya a robar y que no haga compromisos.
¿Quién te gusta para presidente?
Realmente he estado muy alejada del panorama político, no conozco las actividades de los políticos, porque tu sabes de donde vengo, y en los últimos dos meses me he dedicado mucho a mi trabajo, entonces me gustaría hacer un comentario responsable y hacer proselitismo.
Gloria Trevi prefiere hablar de su disco, quiere hacer promoción, y aunque no se molesta por las preguntas, voltea a ver a quienes le acompañan en el cuarto del hotel: su manager y gente de la disquera.
Rechaza de manera sutil hablar sobre la muerte de su hija.
"No, no hay ningún proceso judicial sobre eso", dice Trevi, que a sus 36 años y con dos embarazos continúa luciendo figura de modelo y abdomen plano, a pesar de que seguido le entra a esos sandwiches lo suficientemente rellenos de jamón y pepperoni, como lo marca el Manual del Buen Emparedado para el Hambriento.
La conversación vuelve al disco, pero sin dejar de lado sobre lo que no quiere hablar, entonces le pregunto sobre el diseño de la contraportada, que contiene las palabras: Amor, miedo, hambre, soledad, fuerza, voluntad y perdón.
¿Por qué esas palabras?
Fíjate que el chavo que hizo el diseño de la portada me pidió que le dijera las primeras siete palabras que se me vinieran a la mente. Quién sabe qué diría un sicólogo si las leyera. Una de ellas es porque de seguro tenía hambre", responde Trevi cuando su sándwich ya va a la mitad.
La canción ‘Nota Roja’ (la número ocho del nuevo disco) parece un reclamo a los medios de comunicación, ¿eso es?
Es una crítica a una realidad que se está viviendo. Cuando este disco salió, a los dos días pasó algo terrible, lincharon a unos policías en México, y hubo personas que decían que parecía profética la canción, y no es que sea profética, lo que pasa es que está hablando de una realidad, porque a mí me sorprendió que estaban entrevistando a los policías que unos minutos después iban a ser quemados... entonces me dan la impresión que algunos periodistas dejan que las cosas sucedan para poder grabarlas, para poder tener rating, o sea, no mames.
Hay otras dos canciones en el disco, ‘Sexo y dinero’, y ‘Poder y fama’ (la 10 y la 11 respectivamente), ¿qué representan para ti estas palabras?
Cosas que quiero, ¿tú no?.
La última canción del disco y el primer sencillo es ‘En medio de la tempestad’, ¿no crees que parece que todavía te sigue lloviendo?
Sigue lloviendo, tronando, estamos en medio de un huracán, y que venga más, porque estamos listos para seguir luchando.
Sobre el proceso judicial, ¿qué ha pasado?
A mí ya me dieron sentencia absolutoria, yo estoy desligada y desinformada de lo que está pasando.
¿Ya te deslindaste de Sergio Andrade?
Ya me separé directamente de él. Sólo conservo los recuerdos que me sirven de enseñanza para ser mejor persona y no tropezar con la misma piedra.
Gloria Trevi estuvo desde el jueves y hasta el sábado en esta ciudad para promocionar su disco. Hizo una breve aparición en el concierto Torta Fest en Anaheim y luego estuvo firmando autógrafos en una discoteca de Commerce.
Anunció que el próximo 22 de abril ofrecerá un concierto en Los Ángeles. "Voy a estarlos esperando con látigo y toda la cosa, va ser una noche especial, el jueves fue algo bonito pero no es ni una probadita... va a ser una noche para mi raza".
En el concierto comentaste que tú creíste en alguien con los ojos cerrados, ¿te referías a Sergio Andrade?
Así es.
¿Ya no crees en él?
No, porque en su momento yo creí en él con los ojos cerrados, porque estaba enamorada. Hay una parte de la canción que dice: ‘Le creo cuando dice te quiero, le quiero que su amor será eterno, le creo que es el hombre más bueno y le creo que la luna es de queso, y si él me da otro beso que más da si me miente, yo le creo’. Eso era porque en una parte yo sabía que él no me valoraba, pero por otra parte qué más daba, mi amor era de una forma en que yo con tal de verlo estaba contenta.
Gracias a Dios yo ya salí de esa situación y ahorita estoy enamorada y por primera vez en mi vida me siento correspondida y estoy feliz.
¿Qué momentos han cambiado tu vida?
Cuando mis padres se divorciaron. Cuando me fui a vivir a México buscando el sueño de ser artista. Cuando conocí a Sergio Andrade y empecé a vivir una etapa de mucha disciplina. Cuando surgió el fenómeno Gloria Trevi en los 90. Cuando tuve a mi hija y cuando la perdí. Cuando estuve en la cárcel. Cuando todas aquellas personas que yo creí que eran mis amigos me dieron la espalda. Cuando descubrí quiénes eran mis verdaderos amigos. Cuando nació mi hijo Angel Gabriel.
¿Quiénes te dieron la espalda?
Gente que trabajaba conmigo, que yo consideraba mi amiga, que vivió a mis costillas. No quiero mencionarlas por nombre porque forman parte de ese pasado que lo único que me aportó fue el aprendizaje de que se tiene que perdonar cuando te lastiman y traicionan, pero no tienes por qué darles una segunda oportunidad para que lo vuelvan a hacer.
¿Cómo va a ser ahora Gloria Trevi sin Sergio Andrade?
Con el mismo ADN o DNA que me caracteriza. Yo creo que divirtiéndome más. Ahorita siento que puedo salir a pasear, que tengo derecho a ser amada y ya no me conformo nada más con amar.
¿Cómo fue para ti la vida en la cárcel?
Muy difícil, hay que tener consideración por quienes están ahí, porque la cárcel no es como en las películas y la gente que está ahí es muy diferente. Hay alguien que dijo que yo iba a requerir terapia psicológica cuando saliera de la cárcel porque había tratado con toda clase de persona, y me dio mucho coraje por mis compañeras, me parece muy injusto que se les catalogue como criminales cuando el 90% de ellas están ahí por causa de un hombre, y son madres que están llorando por sus hijos que están fuera.
¿Y no crees que ya es tiempo de ir con el psiquiatra?
Creo que no, me siento a gusto como estoy.
Con el cuchillo Gloria unta un poco más de mayonesa al último bocado del sándwich. Se lo termina. Está satisfecha.

Wednesday, January 05, 2005

Benjamín Arellano Félix, supuesto narcotraficante
Octubre/2002
Primera parte...

Habló como si no se tratara de uno de los hombres que hasta hace apenas siete meses era uno de los más buscados en el mundo por las autoridades y acusado de narcotráfico. Con acento sinaloense y bronco, platicó por espacio de tres horas. "Pues si soy de rancho", comentó con una sonrisa.
Dispuesto a platicar y con el objetivo de que la gente conozca su situación en el Centro Federal de Readaptación Social Número Uno "La Palma", en Almoloya de Juárez, Estado de México; Benjamín Arellano Félix recibió al reportero de FRONTERA.
Una entrevista exclusiva y la única que ha dado a un medio de comunicación, en la que el presunto narcotraficante y supuesto jefe del Cartel de Tijuana, revela datos, cuenta su encierro, niega las acusaciones en su contra y derrumba el mito de una leyenda llamada "Arellano Félix".
Si no fuera por el nombre, parecería ser una persona común y corriente.
Dice ser católico, por eso acostumbra encender una veladora frente a la imagen del Sagrado Corazón de Jesús, lo que los militares confundieron con un altar a su hermano Ramón el día que lo detuvieron.
"No entiendo eso que dicen ustedes de que un altar, nunca he tenido un altar yo", indicó.
Sobre la muerte de su hermano dudó. "Puede ser que sí, puede ser que no". A él no le consta, ni vio el cuerpo, ni fue a un velorio, ni se lo informaron antes de ser detenido.
Desde el aula cinco del Centro de Observación y Clasificación (COC) del penal, donde se realizó la entrevista, Benjamín Arellano pide que sea tratado como un preso más.
"No pido privilegios, sino que se me trate como una preso normal, no anormal". Y es que desde su ingreso, hace ya mas de siete meses, se encuentra recluido en el área de celdas de castigo, en un espacio de dos por dos, siempre vigilado con cámaras de video. "Hasta cuando estoy haciendo del baño me ven".
El preso más famoso de Almoloya se dice ser inocente, pero dispuesto a enfrentar sus acusaciones por la vía legal, aunque desconfiado del sistema de justicia del país.
Condenó el hecho de que se involucre a su familia en actividades delictivas, se mostró enojado con los medios de comunicación que han publicado información donde se menciona a su madre, hermanas, esposa e hija. "Ya dejen en paz a mi familia".
Un hombre difícil de entrevistar, rechaza preguntas, mira fijamente a los ojos, casi no se mueve ni se distrae, con el rostro de enojo, la entrevista pudo haber terminado en cualquier momento por la tensión, por eso había que hacer preguntas ligeras para suavizar la situación:
-"¿Quién le gusta para Director Técnico de la Selección Mexicana?"
-"Pues los que se están manejando están bien, pero me gustaría que fuera Hugo Sánchez por ser mexicano, pero parece que ya no lo van a poner, ¿no?".
Poco a poco Benjamín Arellano cambia su rostro y se consigue la primera expresión de alegría cuando se le pregunta por su equipo de fútbol favorito: "A nivel mundial es Brasil".
Pero en cuanto se le comentaba sobre cuestiones de la familia, su molestia era notable. Y de nuevo había que hacer labor de conciliación.
Insistió en que se sepa su situación como segregado, reprimido, sin posibilidad de realizar actividades culturales, deportivas y recreativas. Dijo tener intenciones de estudiar leyes, para en lo personal también poder defenderse.
Se consideró como un hombre común y corriente y no como una leyenda. "Eso es meramente periodístico, nada más…eso lo hicieron ustedes mismos los periodistas".
Su fama se la deben al ex procurador Jorge Carpizo McGregor, comentó, ya que a partir del asesinato del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, del que se desligó y del que ya fue absuelto, empezó la persecución que duró por muchos años, y que de acuerdo con Benjamín Arellano, no sabe si es porque él se supo esconder muy bien o porque las autoridades no trabajaron como debieron.

Sunday, January 02, 2005

El Negro, traficante de personas
Noviembre/2003

Lo advirtió desde la primera llamada telefónica: “te voy a dar la entrevista, pero sin mi nombre, porque entonces sí me comprometes”.
Estuve de acuerdo. Conseguir un “pollero” que esté dispuesto a contar la forma como operan es difícil. Por eso quedamos de vernos donde él propuso: afuera de Palacio Municipal, un lugar muy transitado en lunes al mediodía.
Pasaron más de 45 minutos de la hora pactada y el “pollero” no aparecía. Dijo que traería una gorra y chamarra color blanca para reconocerlo, pero nadie con ese atuendo estaba ahí.
“Llámale otra vez”, le pedí a mi amigo Said Betanzos, quien fue el enlace para tratar de contactar a un traficante de personas en Tijuana.
- ¿Qué onda, dónde estás?
- En un rato más llego. Nos vemos en los tacos que están en el estacionamiento.
Era una estrategia. “En este negocio no puede uno ser confiado”, nos reveló más tarde. Fuimos al puesto de tacos y ahí estaba el hombre de chamarra blanca y gorra de beisbolista. Gordo, lo suficiente como para que los ocho tacos a vapor que se almorzaba apenas le hicieran cosquillas. Moreno, tanto que por ello su apodo: “El Negro”.
- Hola que tal, ¿tu eres El Negro?.
- Simón. Nada más deja termino de comer y nos vamos.
“¿Quieren?”, nos ofreció de los tacos a vapor que almorzaba.
Para ser pollero hay que ser baquetón y “El Negro” lo es.
Es fácil conseguirlos en Tijuana. Uno puede irse a la llamada Zona Norte, ahí donde la vida nocturna nunca acaba, y preguntar por uno. "Quiero pasar al otro lado" y de volada lo consigues. Pero para entrevistarlo es difícil. Si te ven la cara de reportero ni se te acercan. Hasta corres el riesgo de que te pongan unos trancazos por andar de chismoso.
Le dicen "El Negro" y se dedica al negocio de cruzar personas de manera ilegal a los Estados Unidos por esta frontera. Lo acepta y lo reconoce: "soy un pollero".
El "pollero" fue contactado para una entrevista a través de terceras personas. Se le explicó que intentábamos realizar un trabajo periodístico. Aceptó, pero con la condición de no revelar su nombre.
Varias llamadas telefónicas después puso fecha, lugar y hora. "Nos vemos afuera de Palacio Municipal al mediodía", indicó. Pero no llegó. Otra llamada y propuso otro sitio, un puesto de tacos cercano. De ahí a un restaurante, donde se sentó y estuvo dispuesto a hablar.
Tiene apenas 27 años, pero su rostro refleja más de 35. Robusto, viste chamarra de piel blanca, pantalón Levi's y tenis Nike.
Durante casi una hora de entrevista, contó la forma como operan las bandas dedicadas al tráfico de indocumentados en Tijuana, confirmó la corrupción que hay en el gobierno que les permite trabajar, precisó las ganancias económicas que genera esta actividad, pero no quiso revelar nombres. "Ahí también me comprometes, no puedo decir quiénes son".
Para dedicarse al tráfico de personas debe conocer el bajo mundo. “El Negro” tiene apenas dos años como “pollero, pero con un largo historial. “El que anda en esto es baquetón de toda la vida, pero pues ya es el gusto de cada uno, a mí me gusta el desmadre, desde morro he andado de baquetón. Me gusta este trabajo, como me gustaba el anterior, que era la emoción del robo de carros”.
“El Negro” presumió de tener el récord de robar un auto en menos tiempo: 10 segundos y sin llaves. También dijo que en los 5 años que se dedicó a esa actividad, se robó alrededor de 800 carros en Tijuana.
Ahora que se dedica a traficar con personas, “El Negro” se ha propuesto hacer mucho dinero y en un futuro poner un negocio, así como arreglar sus papeles de manera legal para ir de compras a Estados Unidos.“Yo me veo muy ambicioso en este jale, quiero seguir en este negocio, tal vez algún día retirarme, ya cuando haya hecho algo, porque este negocio puede dejar mucho dinero, y posiblemente poner un negocio, porque mira, yo tengo cinco hijos, dos mujeres, y de aquí sale para todos”.